Foto: Andrea Moreno/EL TIEMPO
El historiador Enrique Santos Molano posa al lado del óleo anónimo de 'La Pola', que está en el Museo Nacional de Colombia.
El historiador Enrique Santos Molano posa al lado del óleo anónimo de 'La Pola', que está en el Museo Nacional de Colombia.
Así lo sostiene el historiador Enrique Santos Molano en su libro 'Mujeres libertadoras.
En su libro más reciente 'Mujeres libertadoras', en el que rescata del olvido los nombres de varias de las mujeres cuya actuación fue determinante en el proceso de Independencia, el historiador bogotano Enrique Santos Molano sostiene que Policarpa Salavarrieta no fue novia de Alejo Sabaraín.
"La Pola, efectivamente, no fue novia de Sabaraín. Y llegué a esa deducción porque leyendo todos los documentos que se han escrito sobre 'La Pola', de personas que fueron testigos o que la conocieron, ninguno de ellos habla nunca de su noviazgo con Sabaraín", explica el autor.
Unos de esos primeros textos que el historiador consultó fueron los de un señor Domínguez Roche, quien tuvo a su cargo la escritura de la primera obra de teatro que se presentó en Bogotá en 1820, encargada por el general Santander, sobre la Independencia.
"Este señor Domínguez Roche conoció a 'La Pola' y fue testigo presencial de su fusilamiento y no se refiere para nada el noviazgo con Sabaraín, y en cambio sí menciona que existían amores, un poquito platónicos, entre 'La Pola' y el poeta José María Arcos, a quien también asesinaron con ella", comenta Santos.
Agrega que se remitió también a las memorias de José Hilario López, que fue uno de los encargados de disparar contra 'La Pola' y que cuenta con detalle cómo hizo para no tener que incurrir en lo que para él era una verdadera desgracia: dispararle a su compañera.
El autor también cita los ensayos de Sara Mojica, las memorias de Andrea Ricaurte, quien alojó y escondió en su casa a 'La Pola', y los escritos del poeta Rafael Pombo, en donde está el testimonio de la hermana de María Ignacia Valencia, quien da cuenta de su noviazgo real con Alejo Sabaraín, más no con Salavarrieta.
En el libro, Santos Molano también rinde homenaje a Ana María Argüello, Toribia Verdugo, Manuela Beltrán, La 'Negra' Magdalena, Bárbara Forero, Rafaela Isazi, Antonia Santos y Magdalena Ortega, la esposa de Antonio Nariño.
Sobre esta última, Santos también desmiente sus amoríos con Jorge Tadeo Lozano. "No, esa es una ficción total que se inventó la historiadora doña Carmen Ortega Ricaurte, una fantasía de ella que no tiene ningún piso. Magdalena fue siempre leal a su marido", concluye Santos Molano.
Mujeres históricas
Ana María Argüello: es la mamá de José Antonio Galán. Una mujer que luchó al lado de su hijo hasta morir en Santa Fe de Bogotá agobiada por la pena de su hijo.
Toribia Verdugo: es la esposa de José Antonio Galán que lucha también a su lado y tiene la penosa obligación de recoger la calavera de la cabeza de su marido en Guaduas.
Manuela Beltrán: es la heroína que arranca los carteles de los impuestos en el Socorro y da comienzo a la revolución de Los Comuneros.
La 'Negra' Magdalena: la semana siguiente al acto de Manuela Beltrán, Magdalena es la primera que insita a los hombres a armarse para comenzar una verdadera lucha revolucionaria.
Magdalena Ortega: es la esposa de Antonio Nariño, una verdadera heroína porque al lado de su marido corre todos los sacrificios que este hace en la lucha por la Independencia, lo apoya y es una verdadera conspiradora nata.
Bárbara Forero: es la amante de Pedro Fermín de Vargas, una mujer verdaderamente fuera de serie que se fuga con él haciendo creer que la fuga era por adulterio para no despertar sospechas en las autoridades acerca de los verdaderos motivos conspirativos de esa fuga.
Rafaela Isazi: es la esposa del Marqués de San Jorge, una oriunda de Jeréz de la Frontera, quien al lado de su marido, de Antonio Nariño y de Magdalena Ortega contribuyen con todo lo que está a su alcance para el logro de la Independencia.
Antonia Santos: es hija de Pedro Santos, que era comandante comunero muy amigo de Galán, por lo que le puso Antonia. Y ella a su turno, en 1818, financia por su cuenta una guerrilla que contribuyó a detener las tropas de Barreiro, para que se pudiera ganar la Batalla de Boyacá. Sin embargo fue fusilada ocho días antes de que se diera esa batalla.
En su libro, Santos Molano incluye una lista de las mujeres que fueron fusiladas por los españoles entre 1812 y 1820, de las cuales es muy difícil conseguir datos porque algunas de ellas eran muy jóvenes y no tienen propiamente una biografía, pero si está el hecho de que fueron fusiladas por ser partidarias de la Independencia
Carlos Restrepo
"La Pola, efectivamente, no fue novia de Sabaraín. Y llegué a esa deducción porque leyendo todos los documentos que se han escrito sobre 'La Pola', de personas que fueron testigos o que la conocieron, ninguno de ellos habla nunca de su noviazgo con Sabaraín", explica el autor.
Unos de esos primeros textos que el historiador consultó fueron los de un señor Domínguez Roche, quien tuvo a su cargo la escritura de la primera obra de teatro que se presentó en Bogotá en 1820, encargada por el general Santander, sobre la Independencia.
"Este señor Domínguez Roche conoció a 'La Pola' y fue testigo presencial de su fusilamiento y no se refiere para nada el noviazgo con Sabaraín, y en cambio sí menciona que existían amores, un poquito platónicos, entre 'La Pola' y el poeta José María Arcos, a quien también asesinaron con ella", comenta Santos.
Agrega que se remitió también a las memorias de José Hilario López, que fue uno de los encargados de disparar contra 'La Pola' y que cuenta con detalle cómo hizo para no tener que incurrir en lo que para él era una verdadera desgracia: dispararle a su compañera.
El autor también cita los ensayos de Sara Mojica, las memorias de Andrea Ricaurte, quien alojó y escondió en su casa a 'La Pola', y los escritos del poeta Rafael Pombo, en donde está el testimonio de la hermana de María Ignacia Valencia, quien da cuenta de su noviazgo real con Alejo Sabaraín, más no con Salavarrieta.
En el libro, Santos Molano también rinde homenaje a Ana María Argüello, Toribia Verdugo, Manuela Beltrán, La 'Negra' Magdalena, Bárbara Forero, Rafaela Isazi, Antonia Santos y Magdalena Ortega, la esposa de Antonio Nariño.
Sobre esta última, Santos también desmiente sus amoríos con Jorge Tadeo Lozano. "No, esa es una ficción total que se inventó la historiadora doña Carmen Ortega Ricaurte, una fantasía de ella que no tiene ningún piso. Magdalena fue siempre leal a su marido", concluye Santos Molano.
Mujeres históricas
Ana María Argüello: es la mamá de José Antonio Galán. Una mujer que luchó al lado de su hijo hasta morir en Santa Fe de Bogotá agobiada por la pena de su hijo.
Toribia Verdugo: es la esposa de José Antonio Galán que lucha también a su lado y tiene la penosa obligación de recoger la calavera de la cabeza de su marido en Guaduas.
Manuela Beltrán: es la heroína que arranca los carteles de los impuestos en el Socorro y da comienzo a la revolución de Los Comuneros.
La 'Negra' Magdalena: la semana siguiente al acto de Manuela Beltrán, Magdalena es la primera que insita a los hombres a armarse para comenzar una verdadera lucha revolucionaria.
Magdalena Ortega: es la esposa de Antonio Nariño, una verdadera heroína porque al lado de su marido corre todos los sacrificios que este hace en la lucha por la Independencia, lo apoya y es una verdadera conspiradora nata.
Bárbara Forero: es la amante de Pedro Fermín de Vargas, una mujer verdaderamente fuera de serie que se fuga con él haciendo creer que la fuga era por adulterio para no despertar sospechas en las autoridades acerca de los verdaderos motivos conspirativos de esa fuga.
Rafaela Isazi: es la esposa del Marqués de San Jorge, una oriunda de Jeréz de la Frontera, quien al lado de su marido, de Antonio Nariño y de Magdalena Ortega contribuyen con todo lo que está a su alcance para el logro de la Independencia.
Antonia Santos: es hija de Pedro Santos, que era comandante comunero muy amigo de Galán, por lo que le puso Antonia. Y ella a su turno, en 1818, financia por su cuenta una guerrilla que contribuyó a detener las tropas de Barreiro, para que se pudiera ganar la Batalla de Boyacá. Sin embargo fue fusilada ocho días antes de que se diera esa batalla.
En su libro, Santos Molano incluye una lista de las mujeres que fueron fusiladas por los españoles entre 1812 y 1820, de las cuales es muy difícil conseguir datos porque algunas de ellas eran muy jóvenes y no tienen propiamente una biografía, pero si está el hecho de que fueron fusiladas por ser partidarias de la Independencia
Carlos Restrepo
Cultura y Entretenimiento
Tomado de:ARTICULO-WEB-NOTA
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