CENTRO DE HISTORIA DE HONDA: Recordando la visita de Alfredo Serrano Zabala a la ciudad de Honda

martes, 25 de agosto de 2020

Recordando la visita de Alfredo Serrano Zabala a la ciudad de Honda

Alfredo Serrano Zabala

sosteniendo el ejemplar del periódico El Espectador

Alfredo Serrano Zabala, vino a Honda en el año de 2002, cuando era jefe de prensa de Cormagdalena, y su misión. solicitar el concurso del Museo del Río Magdalena, con una muestra itinerante del mismo a lo largo del rio Magdalena.

Estaba cómo directora del Museo Flor María Laverde Polanco, quien con su donde de gente se comprometió a colaborar en esa magna de empresa de Cormagdalena, en mostrar parte del Museo a los habitantes de la ribera del río.

Alfredo llego temprano, y el Museo estaba cerrado, y quien escribe estas líneas era Cronista-Historiador del Museo, por lo cual le invite a conocer parte de la ciudad, mientras abrían el Museo.

Alfredo asedio a la invitación, y en una pequeña moto, iniciamos el recorrido a lo largo y ancho de la ciudad. Puente Navarro, Pueblo Nuevo, puerto de Arrancaplumas, la Popa, puerto de Caracolí, estación del ferrocarril, casco histórico, plaza de mercado, paseo Bolívar, zona rosa, Alto del Rosario, El Retiro, y Museo del río Magdalena. No quedo ninguna parte de la ribera del río, del centro histórico, del norte, sur y parte del occidente que no se recorriera en la motocicleta.

Tomo fotografías, y días después publico un articulo en la revista Semana.

Dialogo con doña Flor María, y concertaron que piezas del museo irían en el Museo itinerante. Recuerdo el caimán, unas fotografías y la replica del David Arango.

En diciembre, gracias a la invitación de Alfredo, acompañe a la directora Flor María, partiendo de Puerto Triunfo, hacia Cartagena, en el barco La Marcela.

Fue una experiencia única y confortante, porque navegamos el río en el siglo XXI.

Estuvimos en diferentes puertos, recuerdo El Banco donde Ernesto McCausland entrevistaba a José Barros, Santa Ana, Mompox, donde esperaban a García Márquez para festejarlo por los 20 años del premio Nobel (no asistió), pero si el presidente de la Republica y sus ministros. Recorrimos Magangué, y atravesamos la autopista del río El canal del Dique, pasamos por Pasacaballos, y llegamos el 11 de diciembre a Cartagena.

Nos acompañaba en este periplo el joven escritor Luis Barros Pavajeu, quien ha publicado dos novelas, Ciudad Baabel (Alfaguara, 2005) y Los Salmos de la Sangre (Alfaguara, 2009), con quien intercambiábamos relatos, él de los suyos, y los míos, de los Mitos y espantos de Honda.

UN BARCO ETERNO.

Alfredo Serrano, de la Corporación Autónoma del Río Grande de La Magdalena (Cormagdalena), cuenta que La Marcela fue utilizada el año pasado durante la Maratón Náutica Yuma 2002 y que, cuando llegaron a Cartagena, procedentes de Puerto Triunfo, todos en la bahía la miraban con sorpresa. "La ven como si fuera un carrito viejo, de esos antiguos, pero bien conservados. También la adecuamos para acondicionar el museo del río de Honda (Tolima)".

Serrano dice que, por su capacidad y seguridad, la han empleado para devolver los desplazados de Barrancabermeja al sur de Bolívar y para transportar misiones humanitarias a esa región, como sucedió con una caravana internacional hace un par de años. "Es la más famosa y es el testimonio más vivo del resurgir del río".

Hoy, recuerdo ese viaje, porque la persona quien me invito a este maravilloso recorrido, es titular en varios periódicos nacionales, y uno de sus libros, fue llevado a la TV por Netflix y se ha convertido en un éxito internacional.